Francisco I, un Papa de humildad
El pasado 13 de Marzo de 2013, a las 19:06 horas de la tarde, por la chimenea de la Capilla Sixtina de la Basílica de San Pedro en Roma comenzaba a salir un intenso humo blanco que anunciaba al mundo entero el "Habemus Papam" que se pronuncio sobre las 20:20 horas de la tarde ya casi noche.
Al mundo entero se anunciaba el inicio del pontificado de Su Santidad el Papa "Francisco I" un papa que, en su primer día de pontificado nada más salir al balcón de la Basílica al no salir con aires de victoria al balcón, ni con la ya tradicional Cruz de Oro y mucho más sobre su vida como Obispo y ya Cardenal demuestra mucha humildad y sencillez.
Como Cardenal renuncio a comprar una nueva túnica cardenalicia para así poder destinar ese dinero a ayudar a los más necesitados, renuncio a su coche oficial y a su apartamento apostólico para así desplazarse en transporte público o incluso a pie y vivía en un apartamento normal donde el era el quien se hacia de comer y demás.
Se inicia un nuevo pontificado, un pontificado de humildad y de sencillez en el que, estoy seguro que la Iglesia volverá a ir por los caminos que Jesucristo enseño, los caminos de caridad, pobreza y humildad.